Las clínicas de aborto tendrían que incinerar o enterrar los restos fetales y las mujeres tendrían que hacerse una ecografía antes del procedimiento, según la propuesta aprobadas por los legisladores de Utah.
La Legislatura aprobó el viernes el proyecto de ley que regula la eliminación de los restos fetales después de un aborto espontáneo.
El republicano Curt Bramble dijo en un comunicado que los requisitos garantizarán un trato digno, opciones para los padres y espacio para quejarse si es necesario.
Los opositores argumentan que las reglas apuntan a estigmatizar el aborto y pueden ser costosas para clínicas u hospitales. Se han propuesto proyectos de ley similares en estados.
Ahora el proyecto de ley espera por la firma del gobernador republicano Gary Herbert.
El ultrasonido requeriría un técnico para mostrar imágenes y hacer que el latido cardíaco fetal sea audible para cada mujer. El representante republicano Steve Christiansen dijo que esos pasos podrían hacer que una mujer elija no abortar.
"Cuando una mujer ve un video en vivo del bebé que está dentro de su útero y escucha un latido, la lógica diría que muchas mujeres elegirán la vida", dijo el jueves. Su propuesta sigue el modelo de una ley similar en Kentucky que la Corte Suprema de Estados Unidos permitió en diciembre.
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El proyecto de ley de Utah establece que una mujer puede mirar hacia otro lado o pedir que se baje el volumen de los latidos del corazón, pero con la nueva norma los médicos que realizan un aborto sin un ultrasonido podrían enfrentar multas de hasta $ 100,000.
La Cámara de Utah aprobó el jueves las objeciones de demócratas como la representante Suzanne Harrison, quien dijo que obligaría a los médicos a "realizar pruebas completamente innecesarias, que, en este caso, pueden aumentar el daño del feto". Ahora se traslada al Senado.
Los legisladores también están considerando otra propuesta para prohibir los abortos por completo, con excepciones por violación y riesgo grave para la salud de la madre.
Los opositores al aborto en todo el país esperan que nuevos conservadores en la Corte Suprema reconsideren el fallo de 1974.
Alabama aprobó una prohibición casi total de abortos el año pasado, y varios estados aprobaron prohibiciones después de detectar un latido, alrededor de seis semanas. Ninguno ha entrado en vigor.
