Parte del estado de Utah se moverá el sábado de alerta naranja a alerta amarilla, según informó en rueda de prensa el gobernador Gary Herbert.
Herbert dijo que después de revisar la información de casos de contagio se tomó la decisión de que el estado se mudara de riesgo moderado o alerta naranja, a riego bajo o alerta amarilla.
El cambio de fase será para todos los condados y ciudades excepto los condados de Grand, Wasatch y Summit, así como las ciudades de West Valley y Salt Lake, que continúan en alerta naranja hasta nuevo aviso.
El reporte del Departamento de Salud dijo el jueves que el estado registra 6,749 casos de COVID-19 y el número de muertes se mantiene en 75.
El gobernador dijo que se han incrementado las pruebas realizadas, lo que considera que “es algo bueno porque la gente ha entendido la importancia”.
También, informó que las escuelas desde Kínder hasta High School seguirán cerradas por el resto del año y recalcó el uso de mascarillas.
El paso a face amarilla permitirá reabrir las escuelas de manejo y los residentes de Utah tendrán la posibilidad de viajar.
El número de personas que se permitirá en reuniones subió de 20 a 50.