VIOLENCIA

Tiroteo en Jalisco causa nueve muertos; seis de ellos, víctimas de secuestro

La Fiscalía de Jalisco dijo que otros dos eran agentes y uno más, un civil que quedó entre el fuego cruzado.

Balacera en Tlaquepaque, Jalisco
Fiscalía de Jalisco

GUADALAJARA - Nueve personas murieron y dos resultaron heridas luego de un tiroteo entre policías del estado de Jalisco y presuntos delincuentes en el municipio de Tlaquepaque mientras investigaban una presunto secuestro, informó el viernes la Fiscalía General de la entidad.

Mediante un comunicado, la dependencia detalló que dos de los fallecidos pertenecen a la Fiscalía, entre ellos un agente del Ministerio Público y un coordinador de la Unidad de Investigación de Robo de Vehículos, de esa dependencia.

Medios de comunicación locales informaron además del fallecimiento de cinco hombres y una mujer que estaban presuntamente privados de la libertad en una finca, además de un transeúnte que quedó en medio del fuego cruzado.

La dependencia indicó que miembros de la Unidad de Investigación de Robo a Vehículos de la Fiscalía realizaban labores de investigación de una finca en la colonia Las Huertas, de Tlaquepaque, donde presuntamente tenían a varias personas privadas de la libertad cuando fueron agredidos a tiros por sujetos con armas largas.

“En el sitio se tuvo conocimiento de una casa en la que mantenían privadas de la libertad a varias personas y el personal acudió a verificar la situación”, indicó la fiscalía.

El tiroteo se extendió por varios minutos en las calles aledañas, donde una mujer y un menor de edad quedaron heridos por las balas.

El hallazgo de un pozo con 119 bolsas con restos humanos de al menos 44 personas, ha agudizado la crisis forense del occidental estado mexicano de Jalisco.

La fiscalía informó que en la finca “se encontraron indicios que presumen de la comisión de varios ilícitos”.

Jalisco es uno de los estados con mayor presencia de actividad del Cártel Jalisco Nueva Generación que está liderado por Nemesio Oseguera Cervantes, conocido como "El Mencho".

El enfrentamiento ocurrió en un inmueble contiguo a un jardín de niños, donde una maestra invitó a los pequeños a colocarse acostados bajo sus mesitas de trabajo y les dijo que jugarían un rato mientras terminaban los "cohetes de una festividad religiosa".

De esa manera logró proteger a los más de 20 niños de su grupo de estudios y evitó que se asustaran con la balacera.

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