SALT LAKE CITY, UTAH- La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días informó que los 12 misioneros que se encontraban en Nueva Zelanda desaparecidos por el ciclón azotó la región, se encuentran a salvo y contabilizados.
El presidente de la misión, David Thomson, de la Misión Nueva Zelanda de Wellington de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, ha informado que todos los misioneros están seguros y contabilizados.
Las autoridades de La Iglesia dijeron que la tormenta dejó sin servicio de telefonía móvil al área, por lo que los misioneros no habrían podido ponerse en contacto con el presidente de la misión desde el paso de la tormenta.
Los miembros y misioneros están trabajando con los vecinos, la comunidad y los grupos gubernamentales yendo de puerta en puerta para limpiar los vecindarios afectados por la devastación.
Cuatro misioneros fueron evacuados del área de Napier (Hawke's Bay) como parte de una evacuación comunitaria más amplia dirigida por trabajadores de defensa civil de Nueva Zelanda a medida que las aguas crecían rápidamente. Los misioneros pasaron la noche refugiándose en la casa de una familia local de Santos de los Últimos Días.
Los informes indican que varios centros de reuniones de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, especialmente en el norte del país y Hawke's Bay, han sufrido inundaciones y otros daños.
A medida que los informes entrantes continúen brindando una evaluación más completa del impacto del ciclón, el liderazgo de la Iglesia determinará la mejor manera de apoyar los esfuerzos de recuperación en los próximos días y semanas.