Debido a los comentarios del público, ahora se estudiarán dos alternativas adicionales como posibles soluciones a la congestión del tráfico en Little Cottonwood Canyon: una nueva línea de tren de cremallera más una versión más larga de una góndola.
El tren de diésel contará con una rueda dentada para proporcionar tracción en pendientes empinadas, y costaría aproximadamente $ 1,050 millones. La nueva versión de la góndola costaría $ 576 millones.
El tren y la góndola se unirán a otras tres opciones anunciadas previamente para un estudio más profundo.
Las opciones incluyen una góndola más corta que comienza en la boca del cañón, que ahora se estima en $ 546 millones; un sistema mejorado de autobuses de la Autoridad de Tránsito de Utah que funcionaría con una frecuencia de hasta cinco minutos, con un costo de $ 334 millones; y un sistema de autobuses mejorado que incluiría la ampliación de los márgenes de las carreteras para que actúen como carriles exclusivos para autobuses en la temporada alta, $ 481 millones.
El gerente de proyectos del Departamento de Transporte de Utah, Josh Van Jura, dijo el viernes que el público sugirió las dos nuevas opciones mientras UDOT buscaba comentarios.
En realidad, el público hizo 19 propuestas nuevas o refinadas, pero el tren y la góndola más larga fueron los únicos que resultaron factibles después de una revisión preliminar de sus beneficios de tráfico y su capacidad para preservar el entorno del cañón.
“El comentario público es tan esencial para todo lo que hacemos, porque desarrollamos mejores soluciones cuando trabajamos juntos”, dijo Van Jura. Agregó que, al recibir 6,500 comentarios sobre las propuestas del cañón, “este nivel de participación es fantástico de ver. Demuestra lo importantes que son estos cañones para nuestra calidad de vida".
Local
Las nuevas opciones de tren y góndola comenzarían aproximadamente a tres cuartos de milla al oeste de la boca del cañón cerca del restaurante La Caille. Ambos incluirían un garaje de estacionamiento propuesto para 1,500 puestos allí, aunque los funcionarios dicen que se necesitaría estacionamiento adicional en otros sitios para manejar las multitudes esperadas, con un servicio de transporte proporcionado.
Van Jura dijo que UDOT actualmente no es propietario de ese terreno cerca de La Caille y necesitaría comprarlo si se elige alguna de las opciones.
Las cinco opciones, incluidas las dos nuevas, transportarían a las personas directamente a las estaciones de esquí de Alta y Snowbird, sin otras paradas en el cañón. También están previstas principalmente para uso en invierno, cuando la congestión es peor. “Sin embargo, reconocemos que el ferrocarril y la góndola presentan un componente turístico. Entonces, se analizará el servicio de verano”, dijo Van Jura.
“Cualquiera de estos modos de tránsito solo está diseñado para acomodar al 30% de estos usuarios pico, lo que significa que el 70% de la gente seguirá utilizando la carretera”, agregó.
La mayor parte del tráfico del cañón en las horas pico se dirige a Alta y Snowbird, dijo Van Jura. “Entonces, si podemos conseguir que una buena parte de esas personas cambien de modo de transporte, entonces la carretera será realmente estable. Todos esos esquiadores de travesía, excursionistas, trineos, les resultará más fácil llegar a esos múltiples destinos".
Se prevé que el tren recientemente propuesto salga cada 15 minutos y tenga capacidad para unas 250 personas, sirviendo a unas 1,000 personas por hora. Los costos anuales de operación y mantenimiento se estiman en $ 6,3 millones.
La nueva propuesta de góndola, al igual que la versión anterior, tendría góndolas de 35 pasajeros saliendo cada dos minutos y transportaría hasta 1,050 personas por hora. Sus costos operativos anuales se estiman en $ 6,9 millones.
Los costos de operación anuales estimados de las otras opciones son ahora de $ 8,3 millones para la góndola más corta o el autobús mejorado con carriles para autobuses, y $ 10,3 millones para el autobús mejorado sin carriles especiales.
Todas las opciones ahora se estudiarán en profundidad para un borrador de declaración de impacto ambiental que se espera que se complete el próximo verano, que identificará una alternativa preferida. Se espera un estudio final de impacto ambiental para el próximo invierno.
Los funcionarios aún tienen que averiguar cómo pagar por cualquiera de las propuestas.
