Un hecho muy lamentable se suscitó este fin de semana cuando dos niños de 13 y 15 años sin supervisión de sus padres adquirieron un arma de fuego resultando en un accidente mortal, eventos que tienen a la comunidad de West Jordan sin palabras.
SALT LAKE CITY - Un niño de Utah de 13 años murió después de que un amigo de 15 le disparara accidentalmente, dijo la policía.
Los adolescentes se escaparon de sus casas y se reunieron en el estacionamiento de una iglesia en el suburbio de Salt Lake City en West Jordan, dijo el teniente de policía Richard Bell.
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Uno de los niños había traído un arma y accidentalmente se disparó la madrugada del sábado, matando al adolescente más joven. El adolescente no sabía que el arma estaba cargada, dijo.
“No creemos que tuviera la intención de matar a su amigo”, dijo Bell. El niño mayor llamó al 911 después del tiroteo, aterrorizado y con ganas de ayudar a su amigo, dijo.
El joven de 15 años fue ingresado en un centro de detención juvenil bajo sospecha de homicidio involuntario, pero la investigación hasta ahora ha demostrado que el tiroteo fue un "accidente trágico y verdaderamente desafortunado".
Los nombres de los adolescentes no fueron revelados.
La policía no dijo dónde habían sacado el arma los adolescentes, pero advirtió a los propietarios de armas que guardaran las armas de fuego en sus casas y hablaran con los niños sobre la seguridad de las armas.
