La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha donado más de 105,000 libras de alimentos para los afectados por la pandemia en el condado de Orange, California.
Las autoridades de La Iglesia anunciaron que enviarán más ayuda, ya que, "el desempleo va a estar con nosotros durante mucho tiempo".
Regan Ramano, gerente de alimentos de Mercy Warehouse en Laguna Niguel, California, dijo que varias docenas de paletas de frijoles, salsa, espagueti y otros alimentos básicos de la despensa se entregarán al Banco de Alimentos del Condado de Orange para ayudar a satisfacer las crecientes demandas provocadas por el COVID-19.
Mercy Warehouse, la Misión de Rescate del Condado de Orange y Second Harvest se encuentran entre los destinatarios de más de 105,000 libras de alimentos del Almacén Central de Obispos de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
La donación de alimentos es parte de una de las respuestas humanitarias más grandes de la historia de La Iglesia.
“El apoyo de La Iglesia es simplemente fenomenal”, dice Ramano. Como otros bancos de alimentos, el suyo depende de donaciones de corporaciones e individuos.
Los cierres de empresas debido al COVID-19 están provocando despidos y licencias. Cuando llegó esta donación en julio, el desempleo rondaba por el 12% en el condado de Orange, aunque afortunadamente, bajó al 9,9% en agosto.
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Con una población cada vez mayor de personas con serias necesidades, la “demanda de alimentos no ha tenido precedentes”, dice Harald Herrmann, director ejecutivo de Second Harvest, un Banco de Alimentos con sede en Irvine, California.
En febrero de 2020, Second Harvest distribuyó alimentos a aproximadamente 249,174 residentes. En junio, el número aumentó a unas 521,394 personas.
El presidente Jim Palmer de la Misión de Rescate del Condado de Orange, que brinda servicios de alimentación, vivienda, educación y empleo, dice que el comienzo de la pandemia fue un momento de tocar y empezar. “No se podían comprar alimentos a granel. Se cerraron las escuelas, se cerraron las iglesias, los grupos de servicio disminuyeron y hubo una gran presión sobre la comida necesaria”.
La necesidad seguirá existiendo en el futuro previsible, añade Palmer. La Misión de Rescate del Condado de Orange se está preparando para la próxima ola de pérdidas de empleos. "Quién sabe cómo se verá", dice. "El desempleo va a estar con nosotros durante mucho tiempo".
