OGDEN, UTAH- Dos sospechosos enfrentan más de 600 cargos tras el hallazgo de 167 animales en una vivienda de Ogden, según informó la policía.
El 15 de abril de 2025, la Unidad de Servicios para Animales del Departamento de Policía de Ogden respondió a un reporte de posible negligencia animal en una residencia privada en Ogden.
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SUSCRÍBETE Tras la investigación, los oficiales descubrieron un total de 157 perros y 11 gatos viviendo en condiciones insalubres y de hacinamiento.
Durante la semana, los oficiales de Control de Animales de Ogden, con la ayuda del Control de Animales del Condado de Weber, el Refugio de Animales del Condado de Weber, el Control de Animales Roy y un oficial de Control de Animales de Draper que ofreció su tiempo como voluntario, retiraron de forma segura a los 167 animales.
Los animales fueron transportados al Refugio de Animales del Condado de Weber, donde recibieron evaluaciones y atención veterinaria.
La mayoría de los animales fueron transferidos a refugios y organizaciones de rescate en todo Utah, incluyendo Blackfoot, Idaho, Servicios para Animales del Condado de Salt Lake, Davis y la Sociedad Protectora de Animales de Utah.
Los dueños de los animales cooperaron con las autoridades durante el proceso de recuperación y firmaron la documentación que autoriza el rescate y el retiro de los animales.
Local
Tras la investigación, la Fiscalía de la Ciudad de Ogden presentó cargos el 7 de mayo de 2025 contra dos personas:
Miguel Salgado-Vargas
- 168 cargos de Crueldad Animal
- 168 cargos de Alteración Pública
- 148 cargos de No Vacunación Antirrábica
- 148 cargos de Animal Sin Licencia
- 1 cargo de Criadero Ilegal de Animales
Ramón Cano Aispuro
- 168 cargos de Crueldad Animal
- 168 cargos de Alteración Pública
Los registros indican que una situación similar, involucrando a las mismas personas, ocurrió en 2012.
"Agradecemos la rápida coordinación entre nuestros socios locales y regionales, que garantizó que cada animal fuera retirado de forma segura y recibiera la atención que necesitaba", declaró el jefe de policía de Ogden, Jake Sube. "Este caso es un recordatorio de la importancia de la denuncia comunitaria y la cooperación regional".
