La alcaldesa de Salt Lake City, Erin Mendenhall, declaró estado de emergencia la noche del martes para prepararse para una posible propagación de coronavirus.
“Si bien no hay casos conocidos de COVID-19 en Salt Lake City, es importante que actuemos preventivamente para prepararnos ahora. Hacerlo nos ayudará a garantizar la estabilidad financiera de nuestra ciudad y la continuidad de las operaciones vitales en caso de que experimentemos la propagación de este virus ", dijo Mendenhall. "Esta declaración nos equipará con los recursos y habilidades necesarios si surge la necesidad".
Esta medida asegurará que Salt Lake City pueda acceder a fondos y asistencia estatales y federales si es necesario.
También le permite a la alcaldesa Mendenhall invocar reglas para proteger a los ciudadanos de Salt Lake City, incluidas restricciones de ingreso o egreso, toque de queda y otras acciones preventivas para garantizar la seguridad de los residentes de la ciudad.
"Si bien esperamos no tener que usar ningún poder bajo esta declaración, en última instancia, lo mejor que podemos hacer como ciudad para nuestros residentes es estar preparados", agregó Mendenhall.
A medida que Salt Lake City se prepara para la posible propagación del virus, los planes incluyen cómo la ciudad continuará con los servicios públicos y respaldará las necesidades únicas de las poblaciones vulnerables.
Se han implementado medidas para garantizar el bienestar del personal de seguridad pública de la ciudad y para coordinar con el condado y el estado para garantizar la continuidad de las operaciones de gestión de emergencias.
