El gobierno de Estado Unidos ha vendido los derechos de perforación de aproximadamente 40 millas cuadradas (104 kilómetros) de tierra cerca de la frontera entre Utah y Colorado, considerada arqueológicamente sensible a una empresa de energía.
Ambientalistas y organizaciones tribales protestan tras la decisión anunciada el miércoles de permitir que Ayres Energy LLC desarrolle tierras cerca del Monumento Nacional Hovenweep en el sureste de Utah.
Los ambientalistas han dicho que perforar en el desierto alto dañaría las estructuras tribales prehistóricas y contaminaría el aire.
La Oficina de Administración de Tierras vendió derechos de perforación a compañías de petróleo y gas, aproximadamente 110 millas cuadradas (285 kilómetros cuadrados) de tierras públicas en todo el estado, generando más de $ 1 millón de dólares durante su venta de arrendamiento en septiembre.
Los representantes de BLM dijeron que la venta ayuda a lograr el objetivo de la administración Trump de promover la independencia energética estadounidense.
