El representante Chris Stewart presento en el Congreso Federal el proyecto de ley “Fairness For All Act” o “Acta de Justicia Para Todos”, calificada como una de las de las propuestas más grandes en esta generación que busca encontrar un balance entre los derechos de la comunidad LGBTQ y las libertades religiosas.
La iniciativa ha sido apoyada por grupos religiosos a lo largo y ancho de todo el país entre ellos La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, sin embargo, organizaciones en pro de la comunidad LGBTQ no cuestionan el verdadero propósito.
Para un estudiante de la Universidad de Utah, este documento ha sido creado con el objetivo de utilizar la religión como una excusa para discriminar en contra de personas de la comunidad LGBT.
El congresista Chris Stewart que representa el distrito 2 de Utah, pretende proteger la libertad de religión en lugares de empleo, al mismo tiempo que proteger los derechos de la comunidad LGBTQ, así como preservar los derechos de la primera enmienda.
A través de su cuenta de Twitter, el propulsor principal de dicha medida afirma que todos los hijos de dios merecen un trato digno y poder ser felices sin importar su orientación sexual o sus creencias religiosas.
Para Equiality Utah, Organización sin fines de lucro que defiende a la comunidad LGBTQ, es un paso importante que por primera vez legisladores republicanos y líderes religiosos reconozcan que se debe incluir a la comunidad LGBTQ dentro de las protecciones que la ley brinda, sin embargo, esta es una propuesta que aún tiene muchos aspectos por trabajar y mejorar.
A grandes rasgos la ley permitiría a entidades religiosas poder negarse a realizar ciertas acciones o negar servicios a una persona si sus creencias no se lo permiten.
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El director del Utah Pride Center asevera que, a través de esta legislación, una pareja homosexual no podría adoptar a un menor que se encuentra en un orfanato, a cargo de alguna entidad religiosa o podrían incluso negar atención médica a una persona si la dirección de un hospital es dirigida por cierta religión.
En un comunicado, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días dio su apoyo a este acto de equidad y estableció que “la nación está más unida cuando individuos de diversos grupos.
Pueden trabajar en cooperación para crear y avanzar en políticas de este tipo”.
