La afligida hija de una pareja asesinada en Riverside habló públicamente por primera vez el miércoles mientras los investigadores continúan reconstruyendo la trágica cadena de eventos presuntamente perpretados por un policía de Virginia que, según los investigadores, manejó por todo el país para encontrarse con una adolescente que conoció en línea en un esquema de "catfish".
Tres cuerpos encontrados el viernes en la casa en llamas fueron identificados como los abuelos y la madre de la adolescente. Se trata de Mark Winek, de 69 años, su esposa, Sharie Winek, de 65 años, y su hija de 38 años, Brooke Winek. La policía informó que las causas de sus muertes siguen bajo investigación, pero que no murieron en el incendio.
La hija de la pareja, Mychelle Blandin, habló el miércoles en una emotiva conferencia de prensa con los investigadores sobre la última vez que vio con vida a sus padres y su hermana. Blandin destacó que estuvo con miembros de la familia el día anterior al Día de Acción de Gracias, cuando hubo un debate familiar sobre si los brownies debían ser glaseados con chispas o servidos solos.
"Parecía una tontería en ese momento, pero esa es una conversación y un debate que siempre resonará en mi corazón", lamentó Blandin. "Esa sería la última vez que mi esposo y yo volveríamos a ver a mis padres y a mi hermana".
Las muertes de los miembros de su familia se debieron a lo que las autoridades llamaron un esquema de catfishing llevado a cabo por un oficial de la ley de Virginia que tenía como objetivo a la nieta de 15 años de los Winek.
Austin Lee Edwards, de 28 años, probablemente prendió fuego a la casa el viernes antes de irse con la adolescente, según el Departamento de Policía de Riverside. Edwards murió en un tiroteo en la ciudad del desierto de Kelso.
EEUU
La niña de 15 años que lo acompañaba no resultó herida.
Hasta el mes pasado, Edwards era un policía estatal de Virginia y recientemente fue contratado como ayudante del alguacil en ese estado, indicó un portavoz.
"En este caso, el catfish provocó la muerte de las tres personas más importantes en mi vida: mi mamá, mi papá y mi hermana", insistió Blandin. “Este horrible evento comenzó con un romance en línea inapropiado entre un depredador y una adolescente. Tenemos cierto consuelo de que esta persona nunca volverá a dañar a nadie, especialmente a un menor".
“Este era un adulto que viajó por todo el país para secuestrar a una adolescente de 15 años. Hizo un juramento de proteger y, sin embargo, no lo hizo. Se aprovechó de los más vulnerables”.
TRAGEDIA DESPUÉS DEL DÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS
La serie mortal de eventos se desarrolló cuando el residente de North Chesterfield, Virginia, conoció a la menor en línea y obtuvo su información personal engañándola con una identidad falsa, conocida como “catfishing”, agregó la policía de Riverside. Las autoridades dijeron que parece que Edwards se hizo pasar por un adolescente cuando se comunicó con la niña en línea. Los intercambios podrían haber incluido mensajes de texto y llamadas telefónicas, de acuerdo con las autoridades.
Mientras, la policía de Riverside recibió una llamada para un control de bienestar el viernes por la mañana sobre un hombre y una mujer involucrados en un disturbio cerca de un automóvil estacionado no lejos de una casa en llamas. Los investigadores determinaron más tarde que las dos personas eran Edwards y la adolescente.
Las autoridades informaron que al parecer Edwards estacionó su vehículo en el camino de entrada de un vecino, caminó hasta la casa y mató a los miembros de la familia antes de irse con la menor.
Era un día después de la reunión familiar de Acción de Gracias. Bladin estaba comprando luces navideñas cuando recibió una llamada telefónica de los vecinos de mucho tiempo de sus padres. La casa de sus padres, donde creció con su hermana, estaba en llamas, alertó el vecino.
"No pude llegar lo suficientemente rápido", narró Blandin. "Dejamos todo en el carrito de compras en la tienda".
Se enteró de la muerte de sus padres y su hermana cuando llegaron a la casa. Su sobrina estaba desaparecida, pero Blandin sostuvo que un aviso de un vecino a las autoridades podría haber evitado una mayor tragedia.
"Los queridos vecinos en la calle de mis padres vieron un automóvil desconocido e inmediatamente lo informaron a las autoridades", agregó Blandin. "Hacer esa llamada de ese vecino salvó la vida de mi sobrina. Ese vecino es un héroe a nuestros ojos".
Las autoridades todavía están tratando de determinar las intenciones de Edwards después de irse con la adolescente.
Después de recopilar información en la casa en llamas, las autoridades de Riverside distribuyeron una descripción del vehículo de Edwards a las agencias policiales y varias horas después, la policía localizó el automóvil con Edwards y la adolescente en un área remota no incorporada del condado de San Bernardino. Edwards disparó y fue asesinado por agentes en medio de una balacera entre ambos, detalló la policía.
La adolescente resultó ilesa y fue puesto bajo custodia protectora por el Departamento de Servicios Sociales Públicos del Condado Riverside, explicó la policía de Riverside. La niña ha estado hablando con los investigadores, según el portavoz de la policía de Riverside, Ryan Railsback.
"Esta será una tragedia duradera en su vida", lamentó. "¿Cuánto duró esta relación? ¿Cuándo comenzó? Sus intenciones. Lo que ella sabía, lo que no sabía. Todavía estamos tratando de averiguar si la coaccionaron o la obligaron a irse con él. Ella es una víctima porque como cualquier adolescente o niño, eres vulnerable. Este hombre adulto que está en la aplicación de la ley se aprovechó de eso".
De acuerdo con las autoridades, Edwards parece ser la única persona involucrado en los asesinatos y el inicio del incendio. Además, la policía investiga si hay más víctimas.
Edwards fue contratado por la Policía Estatal de Virginia e ingresó a la academia el 6 de julio de 2021, según la agencia. Se graduó el 21 de enero como soldado y fue asignado al condado Henrico antes de renunciar en octubre. Luego, comenzó a trabajar como ayudante del alguacil en el condado Washington, Virginia, unos días antes de los asesinatos, informó Railsback.
En un comunicado, la Oficina del Alguacil del condado Washington reveló que los empleadores anteriores y la Policía del Estado de Virginia fueron contactados durante el proceso de contratación, pero ningún empleador "reveló ningún problema, reprimenda o investigación interna relacionada con Edwards".
El sospechoso fue contratado por la oficina del alguacil del condado el 16 de noviembre.
“Es impactante y triste para toda la comunidad de las fuerzas del orden que una persona tan malvada pueda infiltrarse en las fuerzas del orden mientras oculta su verdadera identidad como un depredador y asesino informático”, acotó el alguacil del condado Washington, Blake Andis. "Nuestros pensamientos y oraciones están con la familia Winek, sus amigos, oficiales y todos los afectados por este crimen atroz".
SOBRE LAS VÍCTIMAS
Blandin suplicó a los padres que hablaran con sus hijos sobre los depredadores en línea.
“En este momento trágico de nuestra familia, de nuestro dolor, esperamos que salga algo bueno de esto”, opinó Blandin. "Padres, conozcan la actividad en línea de sus hijos. Hagan preguntas sobre lo que están haciendo y con quién están hablando".
"Cuando hable con sus hijos sobre los peligros de sus acciones en línea, utilícenos como referencia. Cuente nuestra historia para ayudar a sus padres, no por miedo sino como ejemplo de algo que sucedió".
Blandin también destacó que su hermana era una amorosa madre soltera de dos hijas adolescentes. Disfrutó viendo sus actividades escolares, incluyendo los conciertos del coro. Ella también coleccionaba los vasos de Starbucks y nunca se perdía un día de lanzamiento.
"Podría recibir un mensaje de texto a las 4 a. m. de ella preguntándome por qué no estaba esperando en la fila con ella", recordó Blandin.
Su padre era un hombre humilde y de voz suave que se esforzaba por ayudar a los demás, reiteró. Fue entrenador de atletismo en la escuela secundaria en varias escuelas del condado Riverside, incluida la escuela secundaria de Arlington.
"Era un hombre con un corazón grande y afectuoso, que se entregaba desinteresadamente a sus estudiantes-atletas", puntualizó Blandin.
Su madre era abuela de cuatro nietos a quienes les gustaba hornear y siempre esperaban hacer galletas navideñas.
"Esa es una tradición que continuaré", finalizó Blandin.